Page 17 - Semanario-03-06-22.pmd
P. 17

17
                                                                                                                                                17
                                                                                                                                                17
                                                                                                                                                17
                                                                                                                                                17
                                                                   Viernes 3 de Junio de 2022
                        El viejo Sultán



                       ADAPTACIÓN DE CUENTO RECOPILADO POR LOS HNOS. GRIMM














                                                                                                                        Ácido es su sabor,
                                                                                                                      bastante dura su piel
                                                                                                                      y si lo quieres tomar,
                                                                                                                  tendrás que apretarlo bien.

                                                                                                              ¿Qué es?                             EL LIMÓN



                                                                                                                    Cargadas van, cargadas
                                                                                                                          vienen y en el
                                                                                                                    camino no se detienen.        LAS HORMIGAS







                                                                                                                   Subo y subo con una colita
                                                                                                                       de trapo. No cortes
                                                                                                                   el hilo porque me escapo.
           Un campesino tenía   do algo: mañana por la  le la almohada de mi    tos, el pobre gato iba
        un perro fiel, que se   mañana va tu señor      cama: se la daré para   rengueando y al mis-                                              LA COMETA
        llamaba Sultán y que    con su mujer al campo   que se eche allí.       mo tiempo estiraba de
        se había hecho viejo,   y llevarán a su niño       Desde ese momen-     dolor el rabo hacia lo
        había perdido todos     pequeño con ellos,      to al viejo Sultán le fue  alto. El lobo y su ayu-
        los dientes y ya no po-  porque no queda na-    tan bien que no pudo    dante llegaron al sitio              Un señor gordito muy
        día morder nada con     die en la casa. Mien-   desear nada mejor.      convenido, pero cuan-
        fuerza.                 tras trabajan, suelen   Poco después lo visitó  do vieron llegar a sus              coloradito no toma café,
           Cierto día estaba el  colocar al niño detrás  el lobo y se alegró de  contrarios, pensaron                   siempre toma té.
        campesino con su mu-    de los árboles, al sol.  que hubiera resultado  que llevaban un sable,
        jer ante la puerta de su  Échate al lado como si  así de bien.          pues vieron el rabo le-                                            EL TOMATE
        casa y dijo:            estuvieras cuidándo-       —Pero, compadre      vantado del gato, y
           —Al viejo Sultán lo  lo. Yo entonces saldré  —dijo—, espero que      cuando el pobre ani-
        mataré mañana de un     del bosque y me lle-    hagas la vista gorda si  mal saltaba en sus tres
        tiro; ya no sirve para  varé al niño y tú sales  yo aprovecho una oca-  patas, no pensaban
        nada.                   corriendo     rápida-   sión para quitarle a tu  sino que recogía pie-
           La mujer, que sin-   mente detrás de mí,     señor una buena ove-    dras para tirárselas.
        tió compasión por el    como si me lo quisie-   ja. Es difícil hoy en día  Entonces les entró
        fiel animal, añadió:    ras arrebatar. Lo de-   salir adelante.         miedo a los dos, el ja-
           —Ya que nos ha ser-  jaré caer y tú se lo de-   —Ni pensarlo, con    balí se escondió en el
        vido durante tantos     vuelves a sus padres.   eso no cuentes —con-    pasto alto y el lobo sal-
        años y ha sido fiel po-  Creerán que lo has     testó el perro—. Yo     tó a un árbol. Cuando
        díamos darle el pan     salvado y te estarán    soy fiel a mi señor y no  llegaron el perro y el
        ahora como caridad.     tan agradecidos que     puedo permitirlo.       gato, se asombraron
           —¿Qué? —excla-       no te harán  ningún        El lobo pensó que    de que no podían dis-
        mó el hombre—. Tú no    daño. Por el contrario,  esto no lo había dicho  tinguir a nadie. Pero el
        estás en tus cabales;   hallarás admiración y   en serio, y cuando lle-  jabalí no se había podi-
        ya no tiene dientes y   no te faltará ya nunca  gó por la noche en si-  do esconder del todo y
        ningún ladrón siente    nada.                   lencio quiso llevarse a  sus orejas sobresalían
        miedo ante él; debe        La propuesta fue     la oveja.               por encima de la gra-
        morir. Es cierto que    del agrado del perro, y    Pero el campesino,   milla.
        nos ha servido bien,    tal como fue pensada    al que el viejo Sultán     Mientras el gato
        pero en compensación    se realizó.             había alertado de los   miraba a su alrededor
        ha tenido su buena         El padre dio un gri-  planes del lobo, lo des-  cuidadosamente, el
        comida.                 to cuando vio que el    cubrió y lo peinó ruda-  jabalí movió las orejas;
           El pobre perro, que  lobo corría con su hijo  mente con el trillo. El  el gato, pensando que
        estaba tumbado al sol   por el campo, pero      lobo tuvo que escapar   allí se movía un ratón,
        no lejos de allí, había  cuando el viejo Sultán  y le gritó al perro:   saltó y lo mordió con
        oído todo y estaba muy  lo trajo de nuevo, se      —¡Espera, mal ca-    fuerza. Entonces se in-
        triste porque el día si-  alegró, lo acarició y  marada, ya te arrepen-  corporó el cerdo con
        guiente tuviera que     dijo:                   tirás de esto!          un enorme chillido y
        ser el último de su        —No se te tocará ni     A la mañana si-      salió corriendo mien-
        vida. Tenía un buen     un pelo, tendrás tu pan  guiente envió el lobo  tras gritaba:
        amigo, el lobo, y se la-  de caridad mientras vi-  al jabalí e hizo que el  —¡Allí en el árbol
        mentó de la fatídica    vas.                    perro saliera al bos-   está el culpable!
        suerte que le habían       A su mujer le encar-  que; allí arreglarían     El perro y el gato le-
        asignado.               gó:                     cuentas. El pobre Sul-  vantaron la mirada y
           —Oye, compadre          —Vete a casa rápi-   tán no pudo encontrar   divisaron al lobo que,
        —dijo el lobo—, que-    damente y hazle al vie-  más ayuda que la de un  avergonzado de ha-
        date tranquilo, que yo  jo Sultán un puré de    gato que no tenía más   berse mostrado tan co-
        te ayudaré a salir de   miga de pan, así no ten-  que tres patas y cuan-  barde, aceptó hacer las
        este apuro. He pensa-   drá que mascar, y tráe-  do salieron de allí jun-  paces con el perro.
   12   13   14   15   16   17   18   19   20   21   22