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Jueves 24 de Marzo de 2022
Las manchas del sapo
ADAPTACIÓN LIBRE DE ANTIGUA LEYENDA LATINOAMERICANA
Siempre estoy en camino,
siempre se habla de mí.
Aún así nunca he existido.
¿Quién soy? EL MAÑANA
Con uno estás herido.
Con dos estás ciego.
¿Qué soy? EL PARCHE DE UN OJO
Solo puedes verme
con los ojos cerrados.
Al comienzo del tiem- sapo. do, le respondió: sado. ¿Qué soy? UN SUEÑO
po, cuando la Tierra era A las 4 en punto el —Te lo contaré algún No puedo seguir car-
aún muy joven, el sapo buitre llegó a la casa del otro día. gando este violín tan pe-
tenía una piel suave. En sapo con su violín, solo El sapo siguió comien- sado ni un minuto más —
aquellos días el sapo era porque el sapo le había do y bailando. Sin embar- pensó el halcón—. No debí
tan fiestero que resulta- pedido que lo llevara. go, el buitre, al que no le pensar en devolverlo, el Soy solo palabras y la gente
ba casi imposible encon- —No estoy del todo divertían las fiestas muy buitre no es amigo mío.
trarlo en su casa. Si al- listo para ir —gritó el concurridas, no lo pasó Entonces, dejó caer el me guarda como un tesoro.
guien tenía una fiesta él sapo, desde la ducha—. muy bien y decidió irse a violín. Abajo, abajo hacia
se presentaba, sin impor- Deja tu violín junto a la casa temprano, sin des- la tierra cayó. ¿Qué soy? UN SECRETO
tar lo lejos que estuviera puerta y entra. Me toma- pedirse de sus anfitrio- —¡Oh!, piedras pe-
de su casa o el tiempo rá un minuto arreglarme. nes y sin llevarse el violín. queñas, apártense de mi
que le tomara llegar. El buitre colocó su Al terminar la fiesta, camino —dijo el sapo al
Un día, el sapo se en- violín con cuidado junto a el sapo saltó dentro del caer—. Pero las piedras
teró que había una fiesta la puerta y entró a la violín y esperó y esperó a pequeñas tenían oídos
en el cielo y decidió ir. casa. El sapo cumplió su que el buitre lo llevara a sordos y no se apartaron
—¿Cómo vas a llegar objetivo saltando por la casa. del camino.
al cielo sin volar? —dijo ventana y se escondió Nadie recogió el vio- Cuando el sapo salió
su amigo, el tatú—. Con dentro del violín. lín y el sapo comenzó a del violín destrozado, es-
tu peso, ningún ave te El buitre esperó y es- preocuparse mucho. Casi taba tan cubierto de mo-
llevará a cuestas. peró a que el sapo se arre- deseó no haber estado retones y manchas que
—Ya verás cómo me glara, pero no escuchó en la fiesta. casi no pudo saltar de
las arreglo para ir a la fies- una palabra de él. Final- Al cabo de un rato, el regreso a su casa.
ta —respondió el sapo. mente se cansó de espe- halcón notó el violín: El buitre nunca supo
No lejos de la casa del rar, recogió su violín y —Este violín pertene- qué fue de su violín o por
sapo vivía un buitre violi- emprendió el vuelo. ce al buitre, se lo llevaré qué el sapo había perdi-
nista que era muy impo- Entonces, el buitre lle- de vuelta. do su buena apariencia e
pular entre todas las aves gó a la fiesta un poco re- El halcón voló hacia la interés por las fiestas.
y las bestias. El sapo fue a trasado y debió explicar a tierra con el violín, el sapo Pero ésta es la razón
visitarlo. todos que había tenido se sacudió terriblemente por la cual, hasta el día
—Buenos días, ami- que esperar al sapo. dentro del instrumento. de hoy, todos los sapos
go —dijo el sapo. ¿Vas a —¡Qué ingenuo eres! Fue entonces que el están cubiertos de man-
asistir a la fiesta en el —dijeron los asistentes. halcón se sintió muy can- chas.
cielo? ¿Cómo crees que un sapo
El buitre respondió puede llegar a una fiesta
que sí planeaba asistir. en el cielo? Los sapos no
—¡Qué bien! —excla- pueden volar. Deja tu vio-
mó el sapo—. ¿Puedo lín en un rincón y ven al
tener el placer de tu com- banquete.
pañía para el viaje? El buitre dejó su violín.
El buitre estaba feliz Tan pronto como se en-
de que alguien se intere- contró solo, el sapo saltó Con el mal tiempo
sara por su presencia. de su escondite. Riendo desaparecen los falsos
Para él era una nueva de oreja a oreja, se dijo:
experiencia. ¡Así que pensaron que no amigos y las moscas.
—Por supuesto que sí, llegaría a la fiesta! ¡Qué
me encantará ir a la fies- sorprendidos estarán de
ta contigo —respondió el verme aquí!
buitre—. ¿A qué hora nos No había nadie en la Cada día que amanece,
encontramos? fiesta que estuviera tan
—Ve a mi casa a las 4, alegre como el sapo. el número de tontos crece.
asegúrate de llevar tu Cuando el buitre le pre-
violín contigo —dijo el guntó cómo había llega-