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Viernes 14 de Octubre de 2022
El altillo de la abuela
ADAPTACIÓN LIBRE DE CUENTO DE TERROR DE BOSQUE DE FANTASÍAS
Nada de lágrimas, por
favor. Es un desperdicio
de buen sufrimiento.
¡Feliz Halloween!
Recuerda: no pierdas
mucho tiempo en la
máscara… sólo una peinada
y estás lista.
Las películas de terror
En los últimos tiem- Tucha? tan emocionada. Por su hermana pequeña.
pos, a partir de la se- Tucha asintió, pues supuesto que quería Pero entonces la mano no crean asesinos.
gunda semana de oc- llevaba un buen rato ser la más valiente del volvió a tocar su hom- Sólo hacen que sean
tubre en nuestro país recostada en la habi- mundo, pero le daban bro y volvió a escuchar
hay movimiento im- tación, pensando que miedo los fantasmas. la voz: más creativos.
portante, sobre todo no había mucho que —Y como tú eres —No está bien que
a nivel comercial y cu- hacer en casa de la tan valiente —conti- quieras asustar a tu
linario, para festejar abuela. nuó Elena—, estoy se- hermana, porque
Halloween. También —Pues sé una cosa gura de que podrías quien podría terminar A tu fiesta de Halloween
se procura tener his- con la que podríamos acercarte al altillo sin asustada puedes ser en honor de las brujas
torias de terror, fan- divertirnos. Verás, hay sentir miedo. tú… Así que si no quie-
tasmas u otras cuitas algo que escuché de- Tucha quería mu- res ver a un fantasma, ¿tenemos que
con las cuales conquis- cir a los mayores… cho a su hermana y le ve a acompañarla. llevarte regalo?
tar los dulces que se Al decir estas pala- hacía caso en todo, Al escuchar esto,
pasan a recoger en la bras Tucha se levantó pero aquí dudó y no Elena se asustó y su-
noche del 31. Es por de donde estaba y se sabía qué responder. bió inmediatamente al
eso que hoy presenta- acercó para conversar La verdad es que no altillo, donde Tucha se
mos un pequeño ade- mejor: quería subir al altillo, encontraba iluminan-
lanto para disfrutar en —¿Y qué escuchas- pero tampoco quería do todo con su linter-
Halloween, que tiene te decir, Elena? que su hermana le di- na.
un mensaje alecciona- —Oh, no es nada… jera que era una co- —La abuela tiene
dor. Seguro que en realidad barde, así que final- muchos muebles vie-
Esta historia co- no quieres saberlo. mente respondió que jos guardados aquí,
mienza una noche —¡Claro que sí! lo haría y subió con hermana. Pero no hay
cualquiera, en la que ¡Cuéntame, cuénta- mucho cuidado de que fantasmas.
Tucha y Elena se en- me! la abuela no se ente- —Ven, Tucha, vol-
contraban en casa de —Ya, pero es que rara. vamos abajo. Seguro
la abuela. Aquel hogar no creo que seas lo su- Mientras Tucha ca- que era solo una bro-
era un sitio muy viejo ficientemente valien- minaba hasta el oscu- ma de los mayores.
en el que la abuela te como para contár- ro altillo acompañada Y aunque Elena
había vivido durante telo. A fin de cuentas por una lámpara, Ele- nunca supo si aquello
muchos años. eres menor que yo… na se quedó en la sala que había escuchado
Al igual que la ma- —¡Claro que sí, soy riéndose de su trave- había sido un fantas-
yoría de los lugares valiente, Elena! ¡Cuén- sura, cuando de pron- ma de verdad o su ima-
muy viejos, la casa de tame, cuéntame! to sintió que una mano ginación, nunca más
la abuela daba un poco —Bueno, pues ya le tocaba el hombro: volvió a intentar que
de miedo. Elena inclu- que insistes tanto te —No está bien su hermana se asusta-
so había escuchado a contaré…Como la casa asustar así a los de- ra, pues aprendió que
los mayores decir que de la abuela es un lu- más —sentenció una no está bien hacerle
en el altillo había fan- gar tan viejo, hay co- voz que no conocía. bromas pesadas a los
tasmas y con mucha sas extrañas en este Al girar, bastante demás.
curiosidad (pero sin lugar, cosas que no asustada, Elena no en- Aunque, eso sí, sin
muchos deseos de todo el mundo puede contró nada tras ella. duda la casa de la
averiguarlo por sí mis- ver. ¡En el altillo hay Así, pensando que ha- abuela no resultaba al
ma), le propuso a su fantasmas! Y solo los bía sido un producto final ser un sitio tan
hermana Tucha: más valientes pueden de su imaginación y aburrido, y las herma-
—¡Qué aburrida es- verlos. que estaba sola, siguió nas se sonrieron mien-
toy! ¿Acaso no estás Al escuchar esto, riéndose de la broma tras se fueron a me-
aburrida tú también, Tucha dejó de estar que le había hecho a rendar.