Page 17 - Semanario-22-12-23.pmd

Ondina: cuidadora del agua

de los bosques

VERSIÓN LIBRE DE CUENTO INFANTIL DE MUMABLUE
ni quería ni podía lle- con alegría y el es-
gar hasta allí, el lugar tanque recuperó el
se fue recuperando. color turquesa.
Volvió a crecer la hier- Bajo su superficie,
ba y brotaron las flo- Ondina volvía a ser
res, regresaron los una criatura dulce y
animales, aparecie- solitaria, un espíritu
ron los hongos. El encargado de cuidar
agua del manantial las aguas de los bos-
volvió a borbotear ques.-

¿No es la vida cien
veces demasiado breve

para aburrirnos?
Friederich Nietzsche

La vida es simple pero
insistimos en hacerla complicada.

La importancia del respeto de los entornos naturales Confucio

En lo más profun- inundaban el lugar recía salido de un to -se lamentó un
do del Bosque de los los fines de semana. cuento de hadas, se hombre mientras ob-
Susurros, al borde de El estanque de fue convirtiendo en servaba el caos a su El punto de salida
un camino casi devo- Ondina se encontra- un paisaje de árido alrededor. hacia todo logro es el deseo.
rado por completo ba al final del cami- aspecto, de aguas -¡Qué pena! Era un
por ortigas y espinos, no. Las aguas del sucias. Los animales lugar tan bonito -res- Napoleón Hill
brota un manantial de manantial eran tan abandonaron el lugar pondió la mujer que
agua fresca. La fuen- refrescantes que los y donde antes cre- lo acompañaba.
te forma un estanque excursionistas apro- cían hongos y bellas Entonces unos
de color turquesa del vechaban para tomar flores, ahora solo ha- misteriosos susurros
que beben las raíces allí un descanso, bía basura. Y Ondina comenzaron a emer-
de cientos de flores montando un pícnic y, no aguantó más. ger de entre la male-
silvestres. Parece un en los días de calor, -¡Yo soy la protec- za. Al principio se es-
lugar salido de un dándose alegres cha- tora de las aguas! - cuchaban bajito y se
mundo mágico. Y en puzones en el estan- gritó. confundían con el
realidad, así es, pues que. Al pronunciar es- crujir de la arena al
bajo la superficie de Cuando aún los vi- tas palabras, Ondina viento. Sin embargo,
límpidas aguas habi- sitantes eran pocos, pasó de ser una cria- poco a poco se fue-
ta un ser solitario y Ondina los miraba tura dulce y risueña a ron haciendo más y A I P S E I H S C B C
misterioso: Ondina. con curiosidad desde convertirse en un ser más fuertes, hasta el
Hubo un tiempo el fondo del agua. A malvado y tenebroso. punto que podían dis- YH E D L O T O L C D
en el que el camino veces acariciaba los Del manantial co- tinguirse algunas fra- AO E A N I D N O O S
que conduce al es- pies de los niños y les menzó a brotar agua ses. Era como si la A L N G M I F I T E L
tanque de Ondina no hacía cosquillas. envenenada y el es- propia Tierra les ha- R L O O R A R I S G L
estaba invadido por Como Ondina se sen- tanque se volvió de blara de forma ame-
la vegetación. Era un tía muy sola, le gus- un intenso color ne- nazante. E S S A Z B D A O A I
sendero despejado taba escuchar sus ri- gro. Los árboles que GA S E M L G S U L S
que servía de ruta a sas de vez en cuando. bebían del estanque Váyanse… R D L O A I O L O O O
excursionistas, pues Pero con los excur- perdieron sus hojas y ¡Fuera!
discurría por entre sionistas no solo lle- se convirtieron en Abandonen este E A S M T A O B R E D
algunas de las zonas garon los niños y las enormes esqueletos lugar… MS A R C L R R S U O
más bonitas del Bos- risas: también llegó de madera de formas E I O O R E U U E Q M
que de los Susurros: la destrucción. Muy espectrales. -¿Han oído esas
la Pradera Irisada, el pronto fueron dema- En un santiamén, voces? T R O S G S L M S N O
Molino Encantado, siados pies pisotean- aquel rincón se con- -¡Sí, vámonos de N I A O U D N A U A C
las Cascadas de Pla- do las flores del bor- virtió en un lugar ló- aquí! Este lugar está A S E S A R F N I T B
ta y el Puente de la de del estanque. De- brego y sombrío don- maldito.
Alegría. masiados gritos que de los susurros se Los excursionistas R I R R U C S I D S O
Al principio era un hacían huir a los pá- volvieron escalo- se fueron, espanta- E H A I C A R G S E C
camino desconocido jaros. Demasiados friantes. dos. Y nunca más na-
por casi todo el mun- niños jugando a Cuando el fin de die se atrevió a acer-
do, pero poco a poco arrancar hongos. De- semana siguiente re- carse al manantial de
se fue llenando de masiada basura olvi- gresaron los excur- Ondina. El sendero
visitantes. Al princi- dada o lanzada, sin sionistas, quedaron que conducía hasta
pio, unos pocos. Des- más, a las aguas del absolutamente deso- allí fue quedando
pués, algunos más… estanque. lados. oculto bajo la vegeta-
Al final, auténticos Poco a poco, aquel -¿Qué ha ocurrido ción.
tumultos de gente lugar que antaño pa- aquí? Todo está muer- Y como la gente ya