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                                                                Viernes 20 de Noviembre de 2020




                          A D A P T A C I Ó N  D E A N T I G U A  F Á B U L A  D E  O R I E N T E













                                                                                                                   ¿Qué le dice
                                                                                                                   un semáforo a otro?
                                                                                                            -¡No me mires que me

                                                                                                            estoy cambiando!




                                                                                                                  ¿Cuál es el colmo

                                                                                                                  de un libro?
                                                                                                            -Que en otoño se caigan
                                                                                                            sus hojas.





           Había una vez un        Otro que lo con-     darinas, pero no           –Cada uno de no-               ¿Qué está al final
        jardín muy hermo-       solaba era el man-      puedo. ¡Me siento       sotros somos lo que
        so en el que crecía     darino, que insistía    frustrado y enfada-     somos. ¿Cómo pre-                 de todo?
        todo tipo de árbo-      en que probara dar      do conmigo mismo        tendes dar peras si
        les. Algunos daban      mandarinas.             por no ser capaz de     no eres un peral?             -La O.
        enormes naranjas           –A lo mejor te re-   crear ni una simple     Tampoco podrás dar
        llenas de jugo; otros   sulta más fácil con     aceituna!               manzanas pues no
        riquísimas peras        las mandarinas. Son        El búho, que era     eres un manzano, ni
        que parecían azu-       más pequeñas que        muy sabio, com-         mandarinas, no eres
        caradas. También        las manzanas y pe-      prendió el motivo de    un mandarino. Tú                  -Papá, ¿qué se siente
        había árboles de        san menos. ¡Haz un      su pena y le dijo con   eres un roble y es-             tener un hijo tan bonito?
        dorados duraznos        esfuerzo a ver si lo    firmeza:                tás en el mundo
        que hacían las deli-    logras!                    –¿Quieres saber      para cumplir otra
        cias de quien los          Nada de nada; el     mi opinión sincera?     misión, muy impor-          -No sé hijo, pregúntale
        probaba.                árbol era incapaz y     ¡El problema es que     tante: acoger a las         a tu abuelo...
           Sólo uno de esos     se sentía muy mal       no te conoces a ti      aves entre tus ra-
        árboles se sentía       por ser diferente y     mismo! Te pasas el      mas y dar sombra a
        muy desdichado          poco productivo.        día haciendo lo que     los seres vivos en
        porque aunque sus          Una mañana un        quieren que hagas       los días de calor. ¡Y
        ramas eran grandes      búho lo escuchó llo-    y en cambio no es-      eso no es todo! Tu
        y muy verdes, no        rar amargamente y       cuchas tu propia voz    belleza contribuye a
        daba ningún tipo de     se posó sobre él.       interior.               alegrar el paisaje y
        fruto. El pobre siem-   Viendo que sus lá-         El árbol puso cara   eres una de las es-
        pre se quejaba de       grimas eran tan         de extrañeza.           pecies más admira-
        su mala suerte.         abundantes, pensó          –¿Mi voz interior?   das por los científi-
           –Amigos, todos       que algo realmente      ¿Qué quieres decir      cos y botánicos. ¿No
        ustedes están car-      grave le pasaba.        con eso?                crees que es sufi-
        gaditos de frutas es-   Con mucho respe-           –¡Sí, tu voz inte-   ciente?
        tupendas, pero yo       to, le habló:           rior! Tú la tienes, to-    En ese momento
        no. Es injusto y ya        –Perdona que te      dos la tenemos, pero    después de muchos
        no sé qué hacer.        moleste… Mira, yo       debemos aprender a      meses, el árbol se
           El árbol todos los   no sé mucho acerca      escucharla. Ella te     alegró. La emoción
        días repetía la mis-    de los problemas        dirá quién eres tú y    recorrió su tronco
        ma canción. Los de-     que tienen los árbo-    cuál es tu función en   porque al fin com-
        más lo apreciaban e     les pero aquí me tie-   este planeta. Ahí está  prendió quién era y
        intentaban que re-      nes por si quieres      la respuesta.           que tenía una pre-
        cuperara la alegría     contarme qué te            El búho le guiñó     ciosa y esencial la-
        con palabras de áni-    pasa. Soy un ani-       un ojo y sin decir ni   bor que cumplir en
        mo. El manzano, por     mal muy observa-        una palabra más         la naturaleza. Jamás
        ejemplo, solía hacer    dor y quizá pueda       alzó vuelo y se per-    volvió a sentirse
        hincapié en centrar-    ayudarte.               dió en la lejanía.      peor que los demás
        se en el problema.         El árbol suspiró y      El árbol se quedó    y logró ser muy feliz
           –A ver, compa-       confesó al ave cuál     meditando y deci-       el resto de su larga
        ñero, si no te con-     era su dolor.           dió seguir el conse-    vida.
        centras, nunca lo          –Gracias por in-     jo del búho. Aspiró        MORALEJA
        conseguirás. Relaja     teresarte por mí,       profundamente              Cada uno de no-
        tu mente e intenta      amigo. Como pue-        para liberarse de los   sotros tiene capaci-
        dar manzanas. ¡A mí     des ver, en este jar-   pensamientos ne-        dades diferentes
        me resulta muy sen-     dín hay cientos de      gativos e intentó       que nos distinguen
        cillo!                  árboles, todos bo-      concentrarse en su      de los demás. Trata
           Pero el árbol, por   nitos y llenos de fru-  propia voz interior.    de conocerte a ti
        mucho que lo inten-     tas excepto yo.         Cuando consiguió        mismo y de sentirte
        taba y trataba de       ¿Acaso no me ves?       desconectar        su   orgulloso de lo que
        imaginar manzanas       Todos mis amigos        mente, escuchó al       eres en vez tratar
        naciendo de sus ra-     insisten en que in-     fin una vocecilla       de ser lo que los
        mas, no lo conse-       tente dar manza-        dentro de él que le     demás quieren que
        guía.                   nas, peras o man-       susurró:                seas.
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