Un grupo de ocho profesionales de Nueva Palmira inició un proyecto social que consiste en una cooperativa de trabajo sin fines de lucro denominada Mbareté (del guaraní, fortaleza), con el objetivo de desarrollar un centro juvenil y convertirse en un espacio de referencia comunitaria.
Según información proporcionada a NOTICIAS, el proyecto nace a partir de la observación de situaciones como el consumo problemático de sustancias, la deserción educativa, la pobreza, la falta de alimentos, la escasez de oportunidades, la depresión y el suicidio. Frente a este panorama, se plantea una intervención profesional orientada a la prevención, el cuidado y el acompañamiento.
La cooperativa está integrada por personas formadas en psicología, arte, trabajo social y educación.
El primer proyecto es la creación de un centro juvenil para adolescentes de entre 12 y 17 años y 11 meses. Se busca que funcione como espacio de educación no formal, con actividades artísticas, deportivas y pedagógicas. Se prevé un cupo de 50 adolescentes organizados en grupos a cargo de educadores, talleristas y un maestro referente. El equipo técnico estará compuesto por dirección, coordinación, psicólogo y trabajador social. También se contempla el trabajo con las familias.
Se gestionará un convenio con el INAU, lo que permitiría contar con respaldo legal y económico para el funcionamiento del centro.
La cooperativa se encuentra en proceso de obtención de personería jurídica. Los costos estimados para completar los trámites ascienden a aproximadamente $80.000. Para cubrirlos se han iniciado gestiones ante empresas locales y se planifican actividades de recaudación.
Más allá del centro juvenil, se aspira a que el espacio funcione como un centro de referencia para toda la comunidad, abierto a personas de todas las edades que requieran orientación o acompañamiento profesional.

Planta de Calcar en Tarariras sigue incorporando trabajadores
La Asociación laboral de trabajadores de Calcar (Altrac) informó la incorporación de siete nuevos empleados a la planta de Tarariras, que se suman a las decenas ya en funciones desde hace seis meses. El gremio destacó que estos ingresos representan un acto de justicia para familias que sostuvieron más de


